Jueves 27 de Junio, 2019 
Es considerada la segunda economía más grande del mundo en términos de producto bruto interno, según el Fondo Monetario Internacional y el país de más rápido crecimiento económico en el mundo desde la década de 1980, con un promedio de crecimiento anual de casi el 10% en los últimos 38 años.
En la actualidad, China es el nodo industrial de gran variedad de artículos y la indiscutible mayor potencia exportadora de bienes a nivel mundial, convirtiéndose en el eje principal de las cadenas de suministros de diversos giros de negocio.
Este crecimiento sostenido responde a una economía socialista, un modelo que integra a empresas del estado que monopolizan los sectores más relevantes, sin embargo se permite la existencia de empresas privadas en sectores acotados; a esta forma de economía el gobierno chino la denomina economía de mercado socialista.
La Dinastía Qing mantuvo el poder durante casi tres siglos al establecerse en 1636 y gobernar desde 1644 hasta el 1 de enero de 1912 con la proclamación provisional de la República China con Sun Yat-Sen como presidente y como consecuencia de la Revolución de Xinhai que había iniciado un año antes, específicamente el 10 de octubre con la sublevación de la guarnición de Wuchang. Sucederían de inmediato otros levantamientos en las demás provincias y por más de un mes, el sistema imperial autocrático quedaba derrocado, como resultado de que la Dinastía había demostrado ser ineficaz en sus esfuerzos por modernizar a China y enfrentar la agresión extranjera, estableciéndose así la República China.
El interés en la Unión Soviética era conseguir que China se desvinculara del capitalismo occidental, para 1923 China firmaría un acuerdo de no agresión con la Unión Soviética, a cambio, de que ésta le prestara ayuda militar y política.
La guerra civil entre el pensamiento socialista y comunista estalló en 1927 y duró hasta 1937, cuando ambos ejércitos unieron fuerzas para luchar contra la invasión japonesa. La guerra chino-japonesa se prolongó en la segunda guerra mundial y, tras la derrota japonesa en 1945, China concluyó como una de las grandes vencedoras del conflicto mundial.
El 1 de octubre de 1949, el líder del Partido Comunista Chino Mao Tse-Tung proclama la República Popular China desde la puerta de Tian'anmen de la Ciudad Prohibida de Pekín. Fue el máximo líder del gigante asiático, hasta su muerte en 1976. Su periodo de gobierno estuvo marcado por el desarrollo del mercado interno y la reducción del analfabetismo.
En 1978 Deng Xiaoping asume el poder, bajo su liderazgo, la República Popular China emprendió las reformas institucionales y económicas que alterarían la base ideológica del comunismo adoptando elementos de libre mercado que eliminarían parte de las barreras proteccionistas de la economía China hacia el resto de las economías del mundo. Estas reformas se intensificarían con los sucesores al gobierno, desde Jiang Zemin en 1993 hasta al actual mandatario Xi Jinping desde el 2012.
Marco Espejo González
Jefe de Gestión del Conocimiento
